martes, 24 de septiembre de 2013

Historia de las poleas

Solo se tiene conocimiento de una mención histórica de lo que puede ser hoy en día una polea, fue realizada por Plutarco en su obra Vidas paralelas, aproximadamente en el año 100 a.C.
En esta mención se nombra a Arquímedes quién le envia una carta a su amigo el rey Hierón de Siracusa afirmando que podía mover cualquier cosa, incluso le dije que si existiera otra Tierra y el pudiera viajar hasta ella, podría mover esta.
Arquimedes, posible inventor de las poleas

El rey muy asombrado le pidió que le demostrara esto moviendo uno de sus barcos de la armada, ya que creía que solo con cientos de hombres y mucho esfuerzo podría hacerlo.
Según el relato, luego de cargar el barco con las bodegas repletas y cientos de pasajeros Arquímedes se sentó a cierta distancia y alzó sin gran esfuerzo el barco.
Por los elementos nombrados (que son los que componen una polea) y la descripción del ahorro de fuerza que hay se supone que este "elemento" de Arquímedes es una polea. En realidad un aparejo o polipasto (seguramente un aparejo potencial), ya que como se sabe una polea no ahorra fuerzas, pero si un conjunto de ellas.

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